La cultura del Té
Tés y tés… de España a Gambia
Esta entrada sabe mejor con un buen vaso de té, y Tinariwen
Iswigh atai [Bebí el té]
En muchos países, la hora del té es mucho más que beber un vaso de té.
Es hospitalidad, es compartir, es un ritual. Despertar y sobremesa… Es cultura.
Aquí mi reflexión tras los últimos meses de té en té, en casas, playas, desiertos y selvas… Desde España a Gambia, pasando por Sahara Occidental, Mauritania y Senegal.
En España el té se bebe despacito y en vaso grande o taza.
Se saborea, se paladea y se acaba quedando tibio antes de haberlo terminado.
Aunque cada vez más gente lo prepara vertiendo las hierbas en la tetera, es habitual encontrar bolsitas individuales de casi todas las variedades de té o infusiones imaginables.
En el norte de Marruecos, no se encuentran fácilmente tantas opciones en bolsitas de té, pero aún si pides un té en una cafetería, te pondrán un gran vaso individual de té verde con hierbabuena.
Del centro al sur de Marruecos, y en las zonas menos turísticas, el té se sirve en tetera y se comparte.
La hierbabuena en ocasiones se sustituye por otras plantas y flores de la montaña y/o el desierto, y los vasos son considerablemente más pequeños.
Su preparación es todo un ritual en el que el azúcar, siempre en abundancia, se mezcla con el té vertiéndolo varias veces de la tetera al vaso y se sirve oxigenándolo desde una altura considerable, para mezclar bien el azúcar.
Se saborea sin prisa, pero sin pausa.
Una vez te adentres en el Sahara Occidental, el vaso de té se cambia por un minúsculo vaso de chupito, así como en Mauritania, Senegal y Gambia.
La preparación lleva su tiempo: El té se pasa de un vaso a otro rápidamente, hasta conseguir que más de la mitad del recipiente sea espuma.
Sobre esta espuma se sirven apenas un par de centímetros de té. Sin hierbas, bien cargado y con azúcar.
Se sacarán únicamente 2 o 3 vasos para todos los presentes, que beben por turnos, muy rápido y ceden el vaso al que está sirviendo, para que vierta, sobre la espuma, 2 nuevos centímetros de té para el siguiente.
Rápido, despacio, suave o fuerte, la hora del té es un momento de reunión. Para algunos un gesto de hospitalidad, parte de la cultura, el despertar, la sobremesa… pero casi siempre, un acto social.
Me apresuro a terminar de escribir estas líneas. El chico que me ofreció el té -que ya casi perdió toda la espuma- espera impaciente para que le devuelva el vaso vacío y poder cedérselo al siguiente.
Abéné, 03/06/14
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Soy Alicia , el alma nómada tras las lineas de este humilde blog.
Mi curiosidad hacia el mundo me llevó a viajar por a África.
En Marruecos descubrí mi pasión por el desierto, y me fui a vivir entre dunas.
También emprendí y pasé de nomadear en solitario, a formar una familia viajera intercultural.
Criando y viajando, entre dos tierras, por le mundo. Con raíces y alas.
Tengo una agencia de viajes (www.tourpormarruecos.com). Fotografío y escribo.
Hola! Soy una estudiante de arquitectura. Actualmente me estoy en búsqueda de información de Senegal para un proyecto. En mi búsqueda me encontré con esta tradición de tomar 3 veces te. Por lo que no dude en buscar de que se trataba. Te agradezco Alicia que compartas este tipo de información tan rica en conocimiento. Un abrazo desde Perú.
Hola Reyna! Me alegra mucho que hayas disfrutado el post y te haya sido además de utilidad.
Espero verte mas por aquí
un abrazo desde Marruecos!